Entre 2 amores

ENTRE 2 AMORES
CAPITULO 2

Le escribí una nota a Yuli explicándole lo de su enfermedad y las indicaciones de que tomara reposo por si despertaba antes de mi regreso. Cuando terminé me fui directo a casa. En el camino estuve pensando en la madre de Yuli, no la había visto en casa, seguramente había tenido mucho trabajo… no tenia cabeza para pensar en ello ahora, aquella pesadilla cruel había dejado un sentimiento amargo dentro de mi.

Llegué al fin, como era de esperarse mis padres no se encontraban, preparé mi ropa con desgana y me metí a bañar, el agua caliente de la ducha era siempre un alivio, relajó mis tensos hombros y borró por unos minutos aquella terrible pesadilla que había tenido, pronto no pude prolongar por más tiempo mi baño y a regañadientes salí, me tomé mi tiempo para secar mi cabello, cambiarme y arreglarme, nadie debía darse cuenta de la horrible noche que había pasado, me aseguré de mantener mi mente en blanco para protegerme del dolor. Por primera vez salí de mi casa sin prisa, caminé con rumbo a la casa de Yuli, no sabía que expresión tendría mi rostro ahora pero debía poner un rostro tranquilizador para ella antes de verla; eran alrededor de las 5:30 cuando llegué a su casa, abrí la puerta avergonzada, sabía que no era correcto entrar a una casa ajena sin permiso pero no estaba segura de que Yuli fuera capaz de abrir la puerta todavía, caminé hacia su cuarto, toqué la puerta y ella me dijo que entrara, así lo hice, ella se encontraba sentada sobre su cama recargando la espalda en la pared mirándome sonriente, se le veía mejor y eso me alegró, me acerqué y me senté a su lado en la cama.

- Leí tu nota- me dijo con un tono de voz apenas audible

- ¿Cómo te sientes? – le pregunté tomando su mano

- En realidad me siento bastante bien para ir a la escuela – anunció sonriendo

- Preferiría que te quedaras a descansar Yuli

- Para nada, iré a la escuela contigo

- Yuli… te quedarás aquí a descansar o me obligarás a quedarme contigo para vigilarte

- Ni hablar Alex, si yo no puedo ir, al menos tu irás

- Bien – deje salir un suspiró- pero te haré el desayuno

Antes de que pudiera protestar salí de la habitación hacia la cocina y le preparé a Yuli un desayuno saludable; cuando terminó de comer me despedí y me encamine en dirección al colegio. Ya ahí comencé a sentir soledad, sabía que se debía a que estaba acostumbrada al calor de Yuli a mi lado todas las mañanas, en cierto modo me sentí como el primer día de clases; sola e insegura. En cuanto entré por el enorme portón como todas las mañanas mis compañeros estaban esperándome ahí, parecían sorprendidos, probablemente por que no estaba Yuli; como siempre pasé media hora repitiendo las mismas palabras de todas las mañanas pero hubo un saludo en especial que llamó mi atención, se debía a que la voz me resultaba demasiado familiar, inconcientemente me volví y alguien se lanzó a mis brazos.

- Alex, buenos días – me dijo Lilly de manera entusiasta mientras me abrazaba

- ¿Lilly? ¿pero que estás haciendo aquí? – pregunté sorprendida

- ¿Es esa manera de recibirme? – me reclamó con tono de fingida indignación

- Lo siento me tomaste por sorpresa, me alegra verte

- Así está mucho mejor – sonrió un instante y luego miró alrededor en busca de algo o alguien - ¿Dónde está Yuli?

- Oh, ayer después de que regresamos del cine comenzó a sentirse mal, por eso no vino hoy

- ¿Se encuentra bien? – preguntó algo alarmada

- Si, está bien, pasaré a verla después del colegio

- Mándale mis saludos por favor

- Lo haré, en que clase estas?

- En la D

La miré estupefacta, esa era mi clase, al parecer ella ya lo sabía ya que se echó a reír ante mi sorpresa, rápidamente me explicó como había terminado en mi clase, cuando hubo finalizado me tomó del brazo y comenzamos a caminar hacia el edificio, íbamos en silencio hasta que ella lo rompió diciendo que necesitaba hablar conmigo a solas, le dije que había un salón que solo se ocupaba en ocasiones especiales y que nadie iba allí, me pidió que le indicara el camino hacia ese lugar y así lo hice. Cuando llegamos yo continuaba callada, aún no lograba sacarme de la mente ese horrible sueño, aún sentía en carne viva el dolor que estrujaba mi pecho y me impedía respirar con regularidad, al entrar encendí las luces, Lilly se encontraba frente a mi tan hermosa y radiante como la recordaba, de algún modo me dolía mirarla ahora, creí que se debía a que ahora sabía cuanto había sufrido por mi causa, mire sus ojos, no había señal de sufrimiento alguno solo felicidad, sus ojos relucían con el característico brillo de la alegría.

- a que se debe tu felicidad?- pregunté curiosa, ella me miró sorprendida, seguramente no se esperaba tal pregunta.

- A que se debe mi felicidad dices? – repitió e hizo un gesto pensativo, después de unos segundos me contestó – seguramente se debe a que regresé a tu lado Alex

Me ruboricé mientras ella reía al ver mi expresión, se acercó para tomar mi mano y ponerla sobre su mejilla, cerró los ojos y suspiró.

- Estoy muy feliz – prosiguió aun con los ojos cerrados – por que me han brindado la oportunidad de conocerte, soy feliz por que soy capaz de cogerte de la mano y estar junto a ti, por que puedo ver tu hermosa sonrisa y puedo ser parte de tu vida, soy feliz… infinitamente feliz por ti…

Una lágrima resbaló por su divino rostro y terminó en nuestras manos, seguida por otras más, retiré mi mano de la suya y comencé a secarle las lágrimas con ternura, Lilly por fin abrió los ojos y me miraba como solamente ella podía mirarme… con amor, sin darme cuenta, sin planearlo siquiera nuestros rostros fueron acercándose hasta que nuestros labios se encontraron, primero fue un beso torpe y fugaz, nos separamos mirándonos fijamente para luego unirnos de nuevo en un beso apasionado, Lilly puso sus brazos alrededor de mi cuello atrayéndome más cerca de ella, mientras yo acomodé mis manos sobre su espalda profundizando más el beso. Sus labios eran dulces no encontré en mi mente un sabor tan exquisito, su piel era incluso más suave que la seda, sus labios y los míos se movían en sincronía, era como si el tiempo se hubiera detenido, yo no podía ver ni sentir nada que no fuera Lilly y estaba segura de que a ella le pasaba lo mismo, solo existíamos ella y yo. Pasó un rato hasta que tuvimos que separarnos a causa de falta de oxígeno, Lilly sonrió y recostó su rostro en mi pecho evitando que nuestro abrazo se deshiciera, las dos cerramos nuestros ojos escuchando el son de nuestras agitadas respiraciones y el latir de nuestros acelerados corazones, comencé a preguntarme por que la había besado, se suponía que yo amaba a Yuli, se suponía que había dejado lo que sentía por Lilly enterrado en el pasado… pero al besarla una descarga de electricidad recorrió mi cuerpo entero en segundos, no entendía

Continuara......

P.D: bueno aqui el cap 2 la autora se disculpa por ser tan corto pero dijo que su cerebro no dio para mas .... que mas le haremos =P