Un despertar

Capitulo 6

Sara

La luminosidad es molesta, abro los ojos de golpe y puedo observar al sol comenzando a salir, eso quería decir que aun era temprano.

¿En donde me encontraba? ¿Cómo había llegado aquí?

No recordaba nada….

Trato de levantarme con ayuda de mis manos pero…

− ¡Auch! − volteo a ver mi mano derecha y no puedo ocultar mi sorpresa al encontrarla ensangrentada y con mis nudillos desechos.

− ¡¿pero que demonios?! − trato de recordar pero mi cabeza me esta matando y la luminosidad no esta ayudando mucho que digamos.

¿Acaso ayer había tomado y tenia resaca?.... no lo creo por que si no tendría nauseas…. ¿entonces que me sucedía?

Levo mi otra mano hacia mi frente que de verdad me estaba matando y veo… mas sangre…

− Pero… ¿Qué carajo hice? − inmediatamente después de terminar esta oración tengo un flash back.

Yo, el dolor, la ira, y…. Una pared….

Trato de levantarme de nuevo y ahora que era conciente de mis heridas lo consigo sin mucha dificultad.

Volteo a ver la pared donde momentos antes había estado recostada y puedo notar sangre ahí también.

− Parece como si hubiera matado algo…− me acerco mas a la pared para observarla mejor, mi expresión cambia de sorpresa a malicia y satisfacción al comprobar que la pared tampoco había quedado bien librada de lo de anoche.

− Jajá jajá ¡Ya vez pared si yo me jodo tú también! ¡Para que veas que no eres tan genial! jajá jajá − me detengo en ese instante…. ¿Qué rayos me pasa? ¿Estoy drogada? Por que desde cualquier ángulo posible, ver a alguien gritándole a una pared diciéndole que le dio su merecido parecería drogado…

− creo que el golpe me afecto mas de lo que esperaba − murmuro mientras veo de nueva cuenta la sangre en mis dedos.

Comienzo a observar el lugar en donde me encuentro… lo conozco es bastante lejos de mi departamento, comienzo a caminar hasta que me encuentro con un restaurante por demás conocido para mi.

Entro y me siento en un lugar de la barra para luego recostarme en ella, la luminosidad me esta matando….

− uuyy pero que pinta traes! − escucho ese timbre de voz que tanto conozco pero no hago caso − no me digas que anoche volviste a tomar….− me dicen en forma de regaño pero sigo sin hacerle caso − ¿es por esa chica? Si quieres que te haga caso hay mejores formas de conseguirlo − me dice aun en forma de regaño.

− ¡¿Cómo sabes eso?! ¡No me digas que es tan obvio! − digo por fin reaccionando con sorpresa y preocupación

− ¡¿pero que diablos te paso?! − dijo la mujer enfrente de mí

− Nada…. − susurro mientras vuelvo a ocultar mi rostro − ¿puedes poner las cortinas? Me duele mi cabeza…. − le suplico

− ¡¿Cómo que nada?! − me responde mientras me agarra de los hombros y vuelve a incorporarme − ¡Mira nada más como estas! ¡¿Querías combinar tu maquillaje con tus ojos?! ¡¿O que?! − me pregunta más que molesta.

La observe, como la había observado tantas veces atrás había hecho, era una mujer de tez morena, algo más baja que yo y unos 15 años mas que yo, para su edad era bastante linda y seguramente en su juventud lo fue aun mas, ella era una de las pocas personas que me había visto en situaciones como esta.

− No se que me paso… − admito con la cabeza gacha

− Estas completamente mojada Elizabeth − dice al sentir mi ropa completamente empapada − ¿Acaso te quedaste toda la noche fuera?

− No toda la noche solo parte de la madrugada − le contesto en modo de defensa dado que el tono que utilizaba era como el que se usa con un niño que no entiende.

− Eso espero, aunque que ganas las tuyas de salir con la lluvia que había − dice mientras comienza a buscar algo

− ¿Llovió toda la noche? − pregunto bastante extrañada

− si a partir de las 11 no paro de llover − contesto y parecía que haber encontrado lo que buscaba

− No lo sentí…. − murmure

− ¡Mira nada más como tienes la mano! − dice al descubrir las heridas de mis nudillos − ¿y aun con esto no te acuerdas de lo que paso? − me pregunta con incredulidad, mientras limpia mis nudillos con algodón y alcohol que había encontrado.

− Por lo que puedo deducir…. Golpee una pared … − me siento mas que estupida al tener que reconocer algo así delante de ella…. − ¡AUCH! ¡¿Que le pusiste a esa cosa?!

− Deja de quejarte, si pudiste golpear una pared también puedes aguantar esto − me regaño − espero que la pared ahiga recibido su merecido − me comenta con una sonrisa juguetona en el rostro

No puedo contener la risa − y yo que creí que estaba drogada cuando le dije eso a la pared − Sigo riendo y esta vez ella me acompaña.

− Ya esta − Me dice mientras coloca una gasa en la herida de mi frente

− Gracias Sara no se que haría sin ti − Dije mientras la vi al rostro y sentía verdadera gratitud, ella era como una madr… ella era como una de esas personas demasiado amables, de esas que son difíciles de encontrar en la vida.

− No es nada − dijo mientras se sentaba alado mío − ahora si dime lo que recuerdas de esto señorita − me dice mientras señala las heridas de mi puño y frente ahora curadas por ella.

Desvío la mirada…. No quería explicarle lo que había sucedido.

No recordaba mucho pero lo que si era demasiado doloroso para explicar y sabia que Sara no se detendría hasta que le dijera….

− Veras…. Lo que paso….fue… − Estaba comenzando a explicarle pero un ruido me interrumpió……

Grrrrrgrrrrr

¿Cuántas veces me puede salvar mi estomago?

− Por lo que veo tienes hambre…. − dijo mientras yo me sonrojaba − bueno que mas le podemos hacer esto es un restaurante ¿Qué impresión le daría a mis clientes si salieras de aquí con hambre? − me comenta para luego guiñarme un ojo.

− Gracias − Respondo casi murmurando mientras agachaba mi cabeza y me sonrojaba, el hecho de que alguien se preocupara por mi aun me hacia sentir incomoda…. No estaba acostumbrada a ese tipo de…. “contacto”

− No hay de que − Dijo parándose y acariciando mi cabeza como si fuera un perro…. Ya iba a reclamarle, pero escucho como suspira pesadamente, alzo la mirada y ella me observa directamente, a diferencia de muchas personas a ella nunca me pareció haberla intimidado mis ojos o mi presencia y si fue así sabia fingir bastante bien….

− Tienes unos ojos preciosos − me dijo mientras colocaba su mano en mi mejilla −…. Una niña de 17 años no debería pasar por todo esto… − Me dice con verdadero pesar

− Muchas cosas no deberían de pasar…. Y aun así pasan − le respondo

− Tienes razón…. − segui observándome con nostalgia − bueno… mejor me voy a cocinar algo antes de que ataques a alguno de mis clientes − se burlo de mi mientras se dirigía a la cocina riendo.

La sigo con la mirada, ella es una de las únicas personas en el mundo que puede decir que me conoce, y yo realmente la admiraba, para mi era realmente difícil de creer que alguien como ella se preocupara por alguien como yo….

Yo nunca podré olvidar como la conocí fue una semana después que llegue a este país, dado que yo había vivido en Japón casi toda mi vida.

En esa semana había prácticamente creado la reputación que hasta hoy me precede en la escuela, que no era otra si no la de una chica guapa, rica, con departamento y por si fuera poco sin padres, nadie sabia la razón de eso y tampoco les interesaba mucho.

Lo único que yo hacia era salir de bar en bar, emborracharme y tener sexo…. Esa era mi vida, si es que a eso se le puede llamar vida….

Fue en una de mis salidas a un bar que conocí a Sara, yo estaba ebria por supuesto y mientras me dirigía con mis “amigos” a mi departamento chocamos con ella, le insultamos y le amenazamos por ese simple hecho…

Me porte de una manera tan estupida que cuando lo recuerdo no puedo mas que sentir vergüenza y culpabilidad….

Y aun así ella me ayudo. Esa misma noche después de beber aun mas y discutir con mis “amigos” por algo que ni siquiera recuerdo, me había ido con unos sujetos a drogarme… Tal vez para mi desgracia o para mi bendición había discutido también con ellos. Las personas con quienes me juntaba en ese tiempo solo les interesaba mi dinero y no hacían otra cosa que verme como un fenómeno por el color de mis ojos…. El punto es que después de haberme quedado en la calle alcoholizada, drogada y por si fuera poco golpeada… apareció ella.

No se como pero llegue al lugar donde me encuentro ahora, Sara me cuido y curo después cuando por fin estuve consiente me semi-explico lo que había sucedido, desde entonces Sara ha sido lo mas parecido a una….

Ha sido como el ángel que siempre desee tener.

− Ten pareces una escoba − dijo burlándose de mi y sacándome de mis pensamientos.

− Si por escoba dices que estoy gorda…. Mejor no como − digo en tono burlón nada más para molestarla.

− ¿¡Gorda!? Niña estás tan flaca que…. Mejor come − me acerca mas el plato con comida.

− Ok… ok − Comienzo a comer y esta… delicioso como siempre.

− Será mejor que te apures o no llegaras a clases − dice para recordarme algo que ya se.

− ¿clases? ¿Quién dijo que iría a clases hoy? − dije mientras seguía comiendo − además ya fui a la escuela ayer, ya cumplí con mi cuota de la semana − dije ahora con una sonrisa

− Elizabeth…. ¿es que no piensas cambiar nunca? − A ella no parecía haberle hecho gracia mi broma

− ¿Por qué todo el mundo me dice eso? Además sabes que no necesito ir a ese lugar…. Solo voy a perder mi tiempo…. − le respondí para defenderme

− Y para que por lo menos en ese tiempo no te metas en problemas − me regaña de nuevo − No creas que no me explicaras “esos” − dijo señalando de nuevo mis heridas − ¿es que no tuviste Madr…. − se detuvo en seco sin terminar esa oración y yo me quede rígida.

− lo siento…no quise… − dijo ahora murmurando.

Me levante sin siquiera mirarle.

− No…. Si te refieres a que si no tuve una madre que me regañara o me dijera que era bueno o malo…. Ps no no la tuve por que “esa” persona no es mi madre…− coloque el dinero en la barra − toma… quédate con el cambio − digo mientras me voy.

− Si sigues desperdiciando tu dinero no te durara − dice algo molesta

Casi comienzo a reir por el simple hecho de plantear esa idea.

− ps quédate para cuando no traiga y listo − le respondo con sarcasmo mientras salgo por fin.

Suspiro con frustración, odio que pase esto, odio que por culpa de “esa” persona pase esto….

− supongo que ya no debe de estar ahí…. − murmuro mientras pienso en mi departamento y en si la morena seguira ahí.

Abro la puerta no logro escuchar nada… absoluto silencio, volteo y me encuentro con mi nota arrugada y tirada en la basura, no puedo evitar sonreír al imaginarme su cara de frustración al leerla.

Me dirijo a mi sala y me acomodo en mi sillón de cuero negro, prendo la televisión y comienzo a cambiar los canales sin darme realmente cuenta de que hay o no hay en ellos…. mi cabeza me esta matando.

− Nada… − me quejo al darme cuenta que era la tercera vez que pasaba por el mismo canal, me levanto frustrada y comienzo a jugar con la idea de ir o no a la escuela, estoy a punto de ir a prepararme cuando me doy cuenta que mi contestadota tiene un mensaje, lo aprieto y espero que se reproduzca:

“Hola Elizabeth soy yo,… bueno llego hoy a la ciudad así que

Si puedes ir a recogerme al aeropuerto seria fantástico… bueno

Espero que oigas esto a tiempo… por cierto mi vuelo llega alas 12: 00 por la puerta 5”

Termino el mensaje y me quedo helada… conocía esa voz perfectamente pero… ¿Qué diablos hacia aquí?....

Continuara……

by: elyon

Notas de la autora: perdonen ..... odio escribir a compu por eso me tardo un buen en transcribir ..... T_T

bueno aqui les dejo mi msn para que dejen sus comentarios, felicitaciones, amenazas de muerte o_o (ya recivi unas XD) bueno bye espero que lo disfruten y perdonen lo lento que va la historia en si : shak_elyonvanangel@hotmail.com

Notas de shakes: bueno tuve que amenazarla .... con no dejarla salir el sabado XP que gran amenaza para los adolecentes jajajajaj bueno ya se como amenazarla asi que vendran mas rapido las continuaciones =P